Después del Asomadero mis piernas necesitaban un poco de descanso, pero tampoco podía descansar mucho ya que el fin de semana me iba a coger unas pequeñas vacaciones aprovechando el puente . Los entrenamientos han sido bastante flojitos, tanto en tiempo como en intensidad y no he dejado de hacer los ejercicios y estiramientos que me había mandado el fisio para no volver a recaer.
Es totalmente cierto cuando te dicen que correr es una parte forma física y otra parte cabeza , asi que aunque haya que ir más despacito y a veces no se pueda entrenar todo lo que se quiere hay que sacar todo lo positivo de cada entrenamiento. Por poco que apeteciera, había que ponerse las zapatillas y salir a correr. Aunque estos entrenamientos fueron poco intensos me sentaron muy bien. Las sensaciones corriendo, incluso con las piernas bastante cansadas, fueron muy buenas, además pensaba en los días que me esperaban con la familia ¡sería una recarga de pilas enorme!
Esta semana no ha habido entrenamiento en la montaña pero el reto sigue adelante … ¡rendirse no es una opción!
Dalida.